La
Cúpula del Milenio ha acogido durante los últimos días la cuadragésima octava
edición de la Feria del Libro de Valladolid, un evento en el que 40 expositores
han tenido la oportunidad de acercar a miles de visitantes al mundo de la
lectura.
La
Feria, organizada por el Ayuntamiento de Valladolid, se celebra en la Cúpula
del Milenio desde su cuadragésimoquinta edición, en 2012. Anteriormente se
había celebrado en la avenida principal del Campo Grande, pero la protección
frente a los elementos motivó su traslado al peculiar edificio situado al otro
lado del río Pisuerga. Aquel año, la Concejala de Cultura, Comercio y Turismo
del Ayuntamiento de Valladolid, Mercedes Cantalapiedra, señaló alguna de las
ventajas de esta ubicación: “celebrar la feria aquí supone un ahorro de
120.000€. Además, se trata de un lugar con unos servicios adecuados para el
desarrollo de las distintas actividades. Muy cerca está el auditorio del
edificio de usos múltiples, la cúpula está ubicada sobre un parking, el entorno
está preparado para el ocio de toda la familia y las propias instalaciones de
la plaza, como el anfiteatro, permiten disfrutar de todo tipo de actividades”.
En
esta ocasión, un total de 40 expositores se han dado cita en la Feria; 17
editores, entre los que se encuentran Círculo de Lectores, Planeta, o medios de
comunicación como El Mundo/Unidad Editorial o El Norte de Castilla; 14
instituciones, entre las que se encuentran el organizador, el Ayuntamiento de
Valladolid, junto a otras pertenecientes a la provincia, como la Diputación de
Valladolid o las dos universidades con presencia en la ciudad (Universidad de
Valladolid y Universidad Europea Miguel de Cervantes), o instituciones ajenas a
la comunidad de Castilla y León como la Asociación de Escritores de Madrid; y 9
libreros, como la conocida Casa del libro.
El
programa de la Feria ha estado repleto de eventos, concursos y exposiciones que
han hecho las delicias de niños y mayores. 28 autores han intervenido en las
conferencias organizadas por la Feria: desde Alberto Gómez Font, encargado del
pregón que dio comienzo a la feria el pasado viernes 24 de abril –pregón que
tituló “Castellano, español y americano”- hasta Alicia Giménez Bartlett,
pasando por Boris Izaguirre, han participado en los eventos de la feria y
después han firmado ejemplares de sus obras. Por las noches también se han
celebrado eventos; “Cuando la feria duerme” es el nombre bajo el que se amparan
los actos celebrados cada día a partir de las 21.30, organizados por el
Instituto Castellano Leonés de la Lengua. El miércoles 29, día dedicado a uno
de los autores más queridos de la literatura vallisoletana, Miguel Delibes, el
arquitecto Ignacio Javier Gil Crespo impartió la conferencia “La arquitectura
tradicional castellana desde la obra literaria de Miguel Delibes”, para dar
paso a la mesa redonda “El sentido del progreso desde mi obra”.
Las
redes sociales y las nuevas tecnologías también han formado parte de la
cuadragésima octava edición de la Feria del Libro de Valladolid, a través,
fundamentalmente del IV Encuentro de Blogueros Inspirados, en el que
participaron los autores de tres blogs: “Mis Medias Mentiras” (Carlos del B.
Iglesias), “Diario de un dependiente” (David Redondo Iglesias) y “La espinilla
cuando besa” (Juan Pizarro, coordinador y presentador del encuentro). También
se ha realizado la sexta edición del “Redlato participativo”, organizado por
Culturatic, y que funciona de la siguiente manera: cada año, unas semanas antes
del comienzo de la feria, un autor escogido por los organizadores (en esta
ocasión el escritor Óscar Esquivias) proporciona las primeras líneas de un relato,
y es el público (quien quiera, no se discrimina la edad, sino la ausencia de
faltas de ortografía y la coherencia en el relato) quien va eligiendo cómo se
desarrolla la historia. En esta ocasión narra una historia de intrigas en la que nada es lo que
parece…
Talleres
para niños y mayores se han celebrado en los distintos espacios que han acogido
la feria (que no sólo se ha desarrollado en la Cúpula sino también en sus
alrededores: la “carpita”, el auditorio, el salón de actos de usos múltiples y
la Plaza del Milenio): talleres de ilustración, de creatividad, incluso un
taller de Braille realizado y patrocinado por la ONCE. La ovejita Lolita
dirigió el taller de ilustración con plastilina, e incluso tuvo lugar un taller
de pintura llamado “Pintacuentos”.
Se
han firmado ejemplares, se han presentado nuevas obras, y sobre todo se han vendido
libros, en una feria que, como cada año –y ya va camino de los 50- ha convertido
a Valladolid en capital literaria, y ha demostrado que, aunque en ocasiones
pueda dar la impresión de no ser así, los libros mueven a la gente. No se han
hecho oficiales las cifras de visitantes, pero todo apunta a que igualará al
del año pasado: 20.000 personas que se acercan a la Cúpula del Milenio, con la
esperanza de salir con un buen libro en sus manos.
Clara
Berbel
0 comentarios:
Publicar un comentario