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martes, 28 de abril de 2015

El sentido de Villalar


El 23 de abril, nuestra fiesta, constituye un símbolo que representa valores tan significativos como la lucha por la libertad y la búsqueda de la justicia. Villalar es la fiesta de todos. No es patrimonio de ningún grupo político, ni de ninguna ideología; es un símbolo identitario de Castilla y León y, tras muchos años y no pocos esfuerzos, hoy la normalidad viene siendo la nota dominante en la celebración del Día de la Comunidad, en la que miles de castellanoleoneses acudiendo a la campa de Villalar, se agrupan en torno a unas señas de identidad  propias.

¿Qué celebramos en Villalar? La revuelta de las ciudades, la guerra de las comunidades. Una historia de todos los tiempos, que en su interpretación más romántica y liberal es la lucha por la libertad frente a los abusos del poder. Hace casi quinientos años, la lluvia de abril precipitó fatalmente los acontecimientos convirtiendo en derrota lo que en principio era un reagrupamiento de las fuerzas comuneras. La caballería imperial desbarató velozmente las inexistentes líneas de las tropas comuneras, que atascadas en el barro pronto sucumbieron. Si aquel 23 de abril de 1521 la suerte de las armas fue desfavorable a las fuerzas comuneras que sucumbieron allí, no ocurrió lo mismo con sus ideales que ya anticipaban nuevas formas de hacer política, basadas en la libertad, la limitación del poder y la igualdad de los ciudadanos; luego asumidas por las revoluciones liberales del siglo XIX.

El movimiento comunero, la guerra de las comunidades, constituye hoy en día una de las principales señas de identidad de Castilla y León, al simbolizar valores como la lucha por la libertad y la justicia, el afán de progreso, o la participación ciudadana en las cuestiones públicas.

Unos valores ya anticipados en las primeras Cortes de 1188 celebradas en la Real Colegiata de San Isidoro, que fueron el inicio de una larga tradición de defensa de las libertades, que tuvo su continuidad, tres siglos después, en este movimiento comunero que constituyó, quizás, una lucha para recuperar el pactismo entre el Rey y el Reino de aquellas Cortes medievales.

Buscaban, en cierto modo, constituir un gobierno representado por el pueblo, por una clase media organizada. Y lo que hoy homenajeamos es ese espíritu de búsqueda de una libertad política organizado en torno a la participación del ciudadano.

Hoy en día los comuneros, la propia batalla de Villalar, siguen estando de plena actualidad. Todos los años concentraciones populares se reúnen en Villalar en el mismo sitio en el que perecieron los jefes del movimiento; los que allí acuden se emocionan todavía ante la evocación de los héroes de 1521. Si Villalar atrae es probablemente porque este lugar tiene, aun hoy, una gran fuerza simbólica, como foco de uno de los episodios históricos más significativos de la historia, no sólo de Castilla y León, sino también de España e incluso de Europa.

Cada 23 de abril rendimos homenaje al esfuerzo colectivo de toda una sociedad, la castellana y leonesa, por ganar día a día su futuro. Un homenaje a los cientos de miles castellanos y leoneses que día a día contribuyen con su trabajo, iniciativa, esfuerzo y tesón a conseguir una Castilla y León mas abierta, mas moderna y mas conexionada.

El día de Castilla y León ha de servimos para celebrar, en torno a unas señas de identidad propias, el camino recorrido como Comunidad Autónoma durante los últimos 30 años, que han posibilitado el periodo de concordia, prosperidad y crecimiento más largo de toda nuestra historia, algo para lo que trabaja la Fundación Villalar. Desde sus inicios en 2003, y de acuerdo con sus objetivos, ha destacado su labor para conquistar la normalidad en la celebración, cada 23 de abril, de nuestra fiesta y, así, hacer de la Campa un lugar de encuentro en libertad.

Por tanto en este  día  recordamos las gestas de los comuneros, conscientes que sus aspiraciones e ideales no quedaron sepultados con ellos. Siguen presentes en la Comunidad Autónoma que en 1978 inició el camino de estabilidad, concordia, prosperidad y progreso más largo de toda nuestra historia. Un recorrido en el que los ciudadanos hacemos desde la libertad, igualdad y fraternidad, valores por los que los comuneros lucharon un día como hoy de 1521.

Alberto Fernández


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